Dile adiós a las secuelas del acné con tecnología de punta
04 de junio del 2019
El acné puede ser un verdadero problema para quien lo padece:según una investigación publicada en el «British Journal of Dermatology», afecta al 9,4% de la población mundial, convirtiéndola en la octava enfermedad más prevalente. Además de ocasionar molestias, puede dejar secuelas y cicatrices poco estéticas, que pueden impactar negativamente en la autoestima
El láser CO2 fraccionado, es una terapia que recurre a un tipo de láser ablativo, el cual forma microcanales en la capa superficial de la piel e inducen a una bioestimulación con reparación de colágeno. Como explica el doctor Erick Torres, especialista en cirugía láser del centro de Medicina Estética de la clínica Ricardo Palma, al tratar las cicatrices o marcas generadas por el acné, lo que hace este proceso es romper el tejido fibroso que se formó, para reemplazarlo por uno de colágeno más flexible, logrando reducir o hasta remover las cicatrices de manera eficiente
Entre 3 a 10 sesiones –dependiendo del estado de la piel– serán necesarias, según el doctor Torres. Él apunta que, en promedio, por cada sesión se puede lograr un 20 a 30% de mejora, siempre dependiendo de las características de la zona a tratar
El tratamiento con láser CO2 fraccionado se inicia –señala el doctor– con una limpieza y exfoliación facial para eliminar de la capa superficial las células muertas; luego de este paso, la piel estará preparada para recibir la luz
A continuación, el especialista aplica anestesia tópica en la zona a tratar, para que el paciente no sienta molestias al momento de los disparos con el láser (estos duran 10 minutos, aproximadamente). Al finalizar la sesión, el paciente sentirá durante un par de horas un leve ardor en el rostro. Se le indicará el uso de un regenerador de piel, un hidratante y un bloqueador; se le recomendará también no exponerse al sol para evitar la sobrepigmentación. En los días siguientes, unas pequeñas costras aparecerán en la zona tratada, las mismas que empezarán a caerse entre el tercer y quinto día. Después de una semana, la piel se verá más luminosa y rejuvenecida
El doctor Torres advierte que el tratamiento no puede aplicarse en personas que tengan un proceso infeccioso o inflamatorio. Tampoco es recomendable para gestantes ni madres lactantes, ya que la piel está pasando por muchos cambios y podría generar zonas muy rojas por mucho tiempo o cicatrices
Fuente: El Comercio – Vida Social